Una de las características más destacadas de la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial (IDDSMM) es que tiene muchas iglesias en el extranjero a nivel mundial.
Otra característica de la Iglesia de Dios es que sus miembros son en su mayoría jóvenes y académicos. Uno de los miembros de la iglesia asegura: “Dentro o fuera de Corea, la mayoría de los miembros tienen entre veinte, treinta y cuarenta años. Muchos de ellos llegaron a ser nuestros miembros cuando visitaron nuestra iglesia para resolver las interrogantes de la Biblia que venían a su mente, mientras estudiaban la Biblia solos.” Y añade: “A diferencia de la respuesta en Corea, si predicamos sobre Dios Madre en los países extranjeros, ellos muestran una respuesta sincera, diciendo: ‘¿Esto realmente está en la Biblia?’”.
La Iglesia de Dios incluso llegó a los continentes de Europa y América, denominados la cuna del cristianismo, y también a los países no cristianos de Medio Oriente y África. Aunque casi todas las iglesias coreanas realizan su obra misionera en el extranjero centrándose en la sociedad coreana, la Iglesia de Dios ha estado predicando principalmente a la población local. Como resultado, incluso en países musulmanes como Pakistán y en los países hinduistas como Nepal y la India, muchas iglesias operan centrándose en los miembros locales.
Uno de los miembros de la iglesia declara: “No realizamos nuestra labor misionera de una manera detestable o con actuaciones del coro en las calles como lo hacen muchas otras iglesias. En Medio Oriente, donde la religión nacional es el islamismo, y en Sudamérica, donde el catolicismo está profundamente arraigado, llevamos a cabo nuestra obra misionera de la misma manera como lo hacemos en Corea, predicando con tranquilidad la palabra de Dios”.
En los Estados Unidos y Europa, el número de cristianos ha ido disminuyendo rápidamente debido a la indiferencia de la nueva generación desde la década de 1990. A pesar de ello, el número de miembros de la Iglesia de Dios aumenta constantemente en su mayor parte con integrantes de entre veinte, treinta y cuarenta años. En el caso de la iglesia de Nueva York, EE. UU., el número de miembros ya supera los mil. Dado que el edificio de la iglesia es pequeño en comparación con el número de miembros, hay docenas de Casas-Iglesia y Oficinas-Iglesia que sirven como iglesias a pequeña escala.
Los miembros del extranjero no se conforman con rendir los cultos en sus iglesias locales, y viajan a Corea, la cuna de la Iglesia de Dios. Ellos visitan el templo principal de la Iglesia de Dios (el Templo de la Nueva Jerusalén) que se encuentra en Bundang, Corea del Sur, y visitan las iglesias representativas de la capital y rinden los cultos allí. Uno de los miembros de la iglesia manifiesta: “Los miembros del extranjero ahorran sus salarios durante varios meses o años para visitar Corea, lo cual es su deseo de toda la vida, y aprovechan sus vacaciones de verano para la visita. Un viaje corto es de cinco días y cuatro noches, y un viaje largo es de quince días y catorce noches. Cada año, más de mil miembros visitan Corea”. Y añade: “El número de visitantes se limita a 350 debido a la falta de alojamiento”.
¿Por qué tantos jóvenes de los Estados Unidos y Europa rechazan las religiones en las cuales sus antepasados han creído por cientos de años, y son atraídos a la iglesia que se inició en Corea, una pequeña tierra del oriente? La respuesta está en la Biblia.
Miqueas 4:1-2 “Acontecerá en los postreros tiempos que el monte de la casa de Jehová será establecido por cabecera de montes, y más alto que los collados, y correrán a él los pueblos. Vendrán muchas naciones, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, y a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y andaremos por sus veredas; porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.”
Isaías 33:20-24 “Mira a Sion, ciudad de nuestras fiestas solemnes; tus ojos verán a Jerusalén, morada de quietud, tienda que no será desarmada, ni serán arrancadas sus estacas, ni ninguna de sus cuerdas será rota. […] Jehová es nuestro juez, Jehová es nuestro legislador, Jehová es nuestro Rey; él mismo nos salvará. […] No dirá el morador: Estoy enfermo; al pueblo que more en ella le será perdonada la iniquidad.”
Sion, a donde la gente corre en los últimos días, es la iglesia donde podemos celebrar las fiestas solemnes de Dios. Entonces, ¿qué iglesia celebra las fiestas solemnes de Dios de acuerdo con las enseñanzas de la Biblia? Es solo la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial. Esta es la razón por la que muchas personas en América, Europa, Asia, África y Oceanía corren a la Iglesia de Dios en estos días.
La Bilbia profetiza que vendrá Cristo por segunda vez para nuestra salvación. Y cuando él venga juntará a sus escogidos y pondrá su sello en sus frentes.
Entonces, ¿donde hará esta obra?
La Biblia dice que donde sale el sol, allí empezará la obra de poner el sello de Dios.
Hoy en día, los que buscan a Dios están yendo a Corea. ¿Por qué?
Porque desde Corea comenzó la última obra de salvación de Dios.
Cristo en su segunda venida, Ahnsahnghong ya vino en Corea y predicó el evangelio del nuevo pacto que había desaparecido en esta tierra. Como dice la Biblia, Acontecerá en los postreros tiempos[…] nos enseñará en sus caminos, y andaremos por sus veredas; porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.
Fue establecida Sion por Dios en Corea y Salió la ley de Dios de allí y Dios mismo viniendo en carne de nuevo nos enseño la verdad de vida que perdimos por satanás.
Cristo Ahnsahnghong estableció la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial en Corea donde es la tierra profetizada y empezó juntar a sus hijos.
Todos los que buscan a Dios deben conocer Cristo que vino por segunda vez y recibir su enseñanza.
Venga a la Iglesia de Dios Sociedad Misionera mundial y reciba a Cristo Ahnsahnghong y a Dios Madre quienes son los salvadores de esta última época.
La tierra santa es Corea porque Cristo Ahnsahnghong,Cristo en su segunda venida, vino a Corea y nuestra Santa Dios Madre habita en Corea.
Todo este milagro sucede porque en Corea está Dios Madre, la Jerusalén celestial, la patria de nuestros espíritus.
Siendo así, inevitablemente todas las naciones vuelan como nubes y como palomas a la Madre Jerusalén, según las profecías de la Biblia.